El CAIS: Una manera radicalmente diferente de Desarrollar Sistemas

Yolanda Euzárraga

Directora del CAIS

Decía Watts Humphrey al que se le considera el padre de la calidad de Software: “Todos los negocios son negocios de Software por lo que todos los negocios se pueden beneficiar mejorando los procesos de Software”. En la última década los proyectos de desarrollo no han evolucionado de manera positiva.

Según un informe de Standish Group, sólo el 40 % de los proyectos de desarrollo de software son exitosos;  para nosotros exitoso significa tener un proyecto que cubra las necesidades de los usuarios, se termine en el tiempo planeado y bajo el presupuesto asignado.

Steelmood se aproxima a este mercado de una manera totalmente diferencial lo que  es parte de su ADN.

Mediante el CAIS o Centro Avanzado de Ingeniería de Software  (nos negamos a llamarlo Software Factory por las negativas connotaciones que este nombre ha ido adquiriendo durante los últimos años) Steelmood es capaz de reducir el coste total de desarrollo de software a la mitad respecto al coste total real de otros proveedores.

Steelmood es capaz de reducir el mantenimiento correctivo hasta en un 80% encontrando los defectos lo antes posible en el ciclo productivo y evitando que  lleguen a las fases de pruebas mediante la implantación de un sistema de filtros.

Steelmood es capaz de disminuir un 20% el desarrollo haciendo bien las cosas desde el principio y utilizando la reusabilidad del código y de disminuir hasta en un 50% el coste de las pruebas consiguiendo que lleguen a dicha fase muchos menos defectos.

Y estas cifras tan agresivas se obtienen en base a un método cuya esencia es medir TIEMPO, TAMAÑO y DEFECTOS de todos los artefactos producidos por cada persona que forma parte del equipo de desarrollo.

PSP (Personal Software Process) y TSP (Team Software Process)  desarrollados en la Universidad  de Carnegie Mellon por Watts Humphrey son las metodologías usadas a nivel de persona y  equipos para el desarrollo de Software y se basan en registrar diariamente el tiempo, tamaño y defectos de todo lo que se hace. De esta forma obtenemos una serie de métricas básicas que generan  otra serie de métricas derivadas para el seguimiento y control del proyecto.

 Basándonos en esas métricas derivadas somos capaces de planificar la calidad de un desarrollo con una fiabilidad mucho mayor que si lo hacemos basándonos en la mayor o menor experiencia de un ingeniero de desarrollo tipo.

Los defectos que no se encuentran o detectan a tiempo acaban apareciendo en la fase de pruebas y es a través de un sistema de filtros en las diferentes fases del desarrollo como podemos conseguir garantizar  o al menos disminuir la posibilidad de que un determinado defecto llegue a la fase de pruebas , de esta manera el impacto económico es muy elevado ya que el coste de corrección de un defecto  en fase de pruebas es muy superior a si es detectado y corregido en la misma fase de requerimientos.

Cuanto  más tiempo permanezca un defecto  en el producto mayor será el tiempo que se requerirá para eliminarlo.

Las bases de todo este proceso son la REVISIÓN la INSPECCIÓN  y la VERIFICACIÓN.

REVISIÓN  por parte del creador de un determinado artefacto; INSPECCIÓN  por parte de una persona ajena al creador del artefacto y VALIDACIÓN o VERIFICACIÓN por parte del usuario final.

Si no se hace esta última validación se corre el riesgo de tener un proyecto muy bien hecho de algo que NO necesita el cliente.

Estas tres fases son los auténticos filtros para evitar que los errores avancen en el ciclo de desarrollo. Para conseguirlo hay que invertir en la calidad (revisiones, inspecciones y validaciones) el doble de tiempo que en pruebas.

Para cerrar yo añadiría que hoy en día para nosotros  los tres factores clave para el éxito son: GESTIÓN de los requerimientos con buenas prácticas internacionales, la fase de requerimientos debe ser considerada por su trascendencia como un proyecto en sí misma por el impacto enorme que tiene en el éxito final del proyecto

DEFINIR y mantener un protocolo de comunicación en el  trabajo entre el  centro de Ingeniería de software y  el cliente, es decir cómo vamos a interactuar, Quien hará Qué, debemos convertirnos en un aliado del cliente y que deje de vernos como el enemigo que trata de engañarle.

Y   finalmente TENER un enfoque de CALIDAD en todo el proceso que genere  calidad en el producto final que es lo que busca el cliente. Para nosotros la  Calidad del producto está en relación directa con el proceso seguido, es decir la calidad de un producto es ‘controlada’ por el proceso que se usó para desarrollarlo.

No queremos decir con esto que en la calidad lo importante es el proceso pero sí que el proceso usado de forma consistente y estándar nos permite administrar la calidad a lo largo de todas las fases del proyecto y no sólo en la fase de pruebas

Porque si el proceso y las métricas usadas son magníficas pero generan un producto final  que no cumple las expectativas del cliente habremos fracasado.

Los beneficios de esta nueva manera de hacer las cosas son:

• Un registro de datos de tiempo tamaño y defectos que permite estimar proyectos basados en datos históricos.
• Un seguimiento de proyectos basados en métricas.
• Una administración total de la calidad  tanto del producto como del proceso usado para construirlo.

Einsten dijo: “Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo”.

Desde Steelmood planteamos un cambio radical en la manera de aproximarnos al mundo del desarrollo,  como única vía para conseguir resultados diferentes. Esa manera diferente de hacer las cosas es como decíamos al principio  parte del ADN de Steelmood.